Vaya, yo veo aquí una muy buena resolución de una composición arriesgada, ya que, en otras manos, podía haber acabado resultando monótona, pero que usted resuelve el asunto magistralmente mediante el movimiento: a través del del color en los cipreses, a través del trazo sesgado de las aguas del estanque... La lehce, la leche, que dijo el otro... ¡Muy interesante!
Margarita, no acababa de encontrar tema, y me refugié en este, tratando de interpretarlo con fuerza expresiva, he aqui la preséncia de los trazos en negro, y como siempre.... hacemos lo que podemos. Gracias,
A mí me parece sensacional ese remate perfilado en negro, con tu tiza mágica de sastre supongo... Boquiabierto me quedo, como siempre que admiro tus trabajos. Un abrazo, Fernando.
Supones bien, amigo Oñera. Yo también me quedo como los pajaritos en el nido, cuando admiro los tuyos. Vamos pintando, que es lo importante. Que mas quieres.
Esos reflejos aumentan la espectacular verticalidad de los cipreses solapando la arquitectura del fondo, composición muy interesante en la que la vegetación cobra todo el protagonismo. Abrazo
Vuestros comentários, en esta ocasión los tuyos, son satisfactoriamente formativos, uno cuando pinta, a lo menos yo, lo hago casi instintivamente, sin reparar mucho en el como y el por que. Ir pintando, y al final....que te voy a contar, que tu no sepas. Gracias Carmen, por tu post.
Belleza de un espacio, los árboles, el estanque, el conjunto armónico que creas me encanta, a mí me gustan esos trazos tan libres que acompañan a la acuarela.
A veces creo que los trazos son libres, y yo dependo de ellos... Eso si, procuro siempre, no siempre lo consigo, que reine la armonía, aunque sea con notas discordantes. Muchas gracias, Carmen.
Vaya, yo veo aquí una muy buena resolución de una composición arriesgada, ya que, en otras manos, podía haber acabado resultando monótona, pero que usted resuelve el asunto magistralmente mediante el movimiento: a través del del color en los cipreses, a través del trazo sesgado de las aguas del estanque... La lehce, la leche, que dijo el otro... ¡Muy interesante!
ResponEliminaAbrazotes gordotes
Margarita, no acababa de encontrar tema, y
ResponEliminame refugié en este, tratando de interpretarlo
con fuerza expresiva, he aqui la preséncia
de los trazos en negro, y como siempre....
hacemos lo que podemos.
Gracias,
A mí me parece sensacional ese remate perfilado en negro, con tu tiza mágica de sastre supongo...
ResponEliminaBoquiabierto me quedo, como siempre que admiro tus trabajos.
Un abrazo, Fernando.
Supones bien, amigo Oñera.
EliminaYo también me quedo como los pajaritos
en el nido, cuando admiro los tuyos.
Vamos pintando, que es lo importante.
Que mas quieres.
Esos reflejos aumentan la espectacular verticalidad de los cipreses solapando la arquitectura del fondo, composición muy interesante en la que la vegetación cobra todo el protagonismo.
ResponEliminaAbrazo
Vuestros comentários, en esta ocasión los tuyos,
Eliminason satisfactoriamente formativos, uno cuando
pinta, a lo menos yo, lo hago casi instintivamente,
sin reparar mucho en el como y el por que.
Ir pintando, y al final....que te voy a contar,
que tu no sepas. Gracias Carmen, por tu post.
Belleza de un espacio, los árboles, el estanque, el conjunto armónico que creas me encanta, a mí me gustan esos trazos tan libres que acompañan a la acuarela.
ResponEliminaA veces creo que los trazos son libres,
Eliminay yo dependo de ellos... Eso si, procuro
siempre, no siempre lo consigo, que reine
la armonía, aunque sea con notas discordantes.
Muchas gracias, Carmen.