Que buena, entran ganas de comérsela. Era una broma, cualquier tema que tocas la magia de tus pinceles te permiten lograr todo lo que te propones, belleza en el color, buena interpretación del tema hasta tal punto que consigues hacernos despertar el apetito, juegos de colores, ambientación, todo me encanta. Gracias.
Si las MONAS de Pascua, son muy ricas, y también muy caras... Y no es broma... pero para pintar son buenas modelos y no se mueven...El apetito estaba en la mesa, que esperaban que acabara de pintarla, para que pasara a mejor vida. Espero, en la proxima Pascua, pintar una porcion para ti, y así la compartimos... Gracias Carmen.
Me pilla esta mona -tan mona- preparándome el lactocafeinado del ángelus y no es justo, pues estando en visperas -vacacionales- me pilla su mona -tan glamurosa, tan apetecible como apetitosa ella- con el horno en paro -bastante infierno tenemos ya con el meteorológico- y con la despensa temblando. Yo la veo a ella, tan exhuberante, tan rubia, tan llena de coloridos y golosos detalles... que se me alborotan los jugos gástricos y se me ensaliva desde el paladar, pasando por el gaznate, al alma. No es justo ver esto a estas horas y en estas circunstancias despenseriles mías.... Por ello, mi mentedemente prefiere imaginar que su mona no es sino el dorado turbante bajo el que se oculta la hermosa cabellera de un fornido, exuberante, y oriental emir, todo buenorro él, que, bien visto, también estará para comérselo...
Abrazotes bien gordotes- Vea usted qué desvaríos y estragos provoca en nuestra pisciana dualidad su golosa mona. La parte buena es que, en pudiendo mirarla pero no catarla -como al emir, qué cosas- no me aportará ni un cm. de volumen a mi venusina -e inexistente- cintura, jiiiii.... No obstante voy a rebuscar unos bizcochos de soletilla que andan tan solos en el armario (por aliviarles su soledad, no crea...) Nos leemos, si al buen Dios le place, en Agosto. Au revoir...
No es que La Mona, por ser mona, se vista de seda, pero siempre será, morderla a ella, mas saludable, que no lo que envuelve la seda, y que se esconde bajo el turbante, de un glamouroso Emir, con solo confitados dátiles, y lujos de edén, lo mejor es que den mona, que nos endulce la Pascua, que con el paso de los dias, ya se rehace en un baño generoso de lacto o de destilado.... eso es lo que veo por mi lado. Eso, nos vamos de VACACIONES, y a la vuelta mas raciones de pintadas y lecciones, dilectas en ocasiones, de selectas opiniones. Au Revoir!!!!.
Que buena, entran ganas de comérsela. Era una broma, cualquier tema que tocas la magia de tus pinceles te permiten lograr todo lo que te propones, belleza en el color, buena interpretación del tema hasta tal punto que consigues hacernos despertar el apetito, juegos de colores, ambientación, todo me encanta. Gracias.
ResponEliminaSi las MONAS de Pascua, son muy ricas, y también muy caras...
EliminaY no es broma... pero para pintar son buenas modelos y no
se mueven...El apetito estaba en la mesa, que esperaban que
acabara de pintarla, para que pasara a mejor vida.
Espero, en la proxima Pascua, pintar una porcion para ti,
y así la compartimos... Gracias Carmen.
Me pilla esta mona -tan mona- preparándome el lactocafeinado del ángelus y no es justo, pues estando en visperas -vacacionales- me pilla su mona -tan glamurosa, tan apetecible como apetitosa ella- con el horno en paro -bastante infierno tenemos ya con el meteorológico- y con la despensa temblando. Yo la veo a ella, tan exhuberante, tan rubia, tan llena de coloridos y golosos detalles... que se me alborotan los jugos gástricos y se me ensaliva desde el paladar, pasando por el gaznate, al alma. No es justo ver esto a estas horas y en estas circunstancias despenseriles mías.... Por ello, mi mentedemente prefiere imaginar que su mona no es sino el dorado turbante bajo el que se oculta la hermosa cabellera de un fornido, exuberante, y oriental emir, todo buenorro él, que, bien visto, también estará para comérselo...
ResponEliminaAbrazotes bien gordotes- Vea usted qué desvaríos y estragos provoca en nuestra pisciana dualidad su golosa mona. La parte buena es que, en pudiendo mirarla pero no catarla -como al emir, qué cosas- no me aportará ni un cm. de volumen a mi venusina -e inexistente- cintura, jiiiii.... No obstante voy a rebuscar unos bizcochos de soletilla que andan tan solos en el armario (por aliviarles su soledad, no crea...)
Nos leemos, si al buen Dios le place, en Agosto. Au revoir...
No es que La Mona, por ser mona, se vista de seda, pero siempre
Eliminaserá, morderla a ella, mas saludable, que no lo que envuelve
la seda, y que se esconde bajo el turbante, de un glamouroso
Emir, con solo confitados dátiles, y lujos de edén, lo mejor
es que den mona, que nos endulce la Pascua, que con el paso
de los dias, ya se rehace en un baño generoso de lacto o de
destilado.... eso es lo que veo por mi lado.
Eso, nos vamos de VACACIONES, y a la vuelta mas raciones de
pintadas y lecciones, dilectas en ocasiones, de selectas
opiniones.
Au Revoir!!!!.