Escena de interior e íntima, aunque presumo que de intimidad robada. Intensa, plácida e inquieta a la vez. Como si el bebedor aguardara o esperara algo o a alguien, como si estuviera pendiente y a la vez ausente de lo que en su entorno sucede. El lugar gris, la escena húmeda, al abrigo sólo de la calidez del rojo vino y del mobiliario. Hubiera pensado en el abrigo del hogar para esta escena, pero el servilletero de bar delata el escenario... (a no ser que el retratante o el retratado padezcan del conicido síndrome "elservilleteropamicasa". jiiiiiii... La investigación concluye: su bebedor de vino es, digamos, "un refugiado".(la mayoría de quienes acudimos a un bar o taberna, lo somos -bebamos lo que bebamos, ya sea vino o café-)
Fué lo que pintamos, después de mojarnos, en nuestra salida del miercoles. Nos refujiamos en un bar, cinco de la colla, y unos hicimos de modelo a los otros. Acuarela pintada, con el vino de la copa
Esa mano tan bien delineada junto a la copa y el servilletero componen un bodegón en primer plano restando protagonismo a la figura , Muy cálida escena. Abrazo
Yo no creo que ese primer plano más potente reste protagonismo al bebedor. Además: qué poca vida le doy a esa copa de vino... ¡Qué difícil es captar una escena así y qué buen resultado has conseguido! Un abrazo, Fernando.
Tienes toda la razón, bajo mi punto de vista le acompaña..., La copa la tuve que pintar dos veces, el tio se la bevía !! Todo es cuestión de voluntad, y un poco de curro. Saludos, viajero incansable.
Escena de interior e íntima, aunque presumo que de intimidad robada. Intensa, plácida e inquieta a la vez. Como si el bebedor aguardara o esperara algo o a alguien, como si estuviera pendiente y a la vez ausente de lo que en su entorno sucede. El lugar gris, la escena húmeda, al abrigo sólo de la calidez del rojo vino y del mobiliario. Hubiera pensado en el abrigo del hogar para esta escena, pero el servilletero de bar delata el escenario... (a no ser que el retratante o el retratado padezcan del conicido síndrome "elservilleteropamicasa". jiiiiiii... La investigación concluye: su bebedor de vino es, digamos, "un refugiado".(la mayoría de quienes acudimos a un bar o taberna, lo somos -bebamos lo que bebamos, ya sea vino o café-)
ResponEliminaAbrazotes gordotes
Fué lo que pintamos, después de mojarnos, en nuestra salida del miercoles.
EliminaNos refujiamos en un bar, cinco de la colla, y unos hicimos de modelo a los
otros. Acuarela pintada, con el vino de la copa
Esa mano tan bien delineada junto a la copa y el servilletero componen un bodegón en primer plano restando protagonismo a la figura , Muy cálida escena.
ResponEliminaAbrazo
Lo hice, buscando el equilibrio.
EliminaEs un poco rompedor.
Si lo vé la Rockera... !!! Gracias, Carmen.
Yo no creo que ese primer plano más potente reste protagonismo al bebedor. Además: qué poca vida le doy a esa copa de vino...
ResponElimina¡Qué difícil es captar una escena así y qué buen resultado has conseguido!
Un abrazo, Fernando.
Tienes toda la razón, bajo mi punto de vista le acompaña...,
EliminaLa copa la tuve que pintar dos veces, el tio se la bevía !!
Todo es cuestión de voluntad, y un poco de curro.
Saludos, viajero incansable.