... dolce far niente, en estos días cálidos, llenos de luz, sentarse a disfrutar de lo que pasa alrededor, sin prisas, sin agobios, es una bendición y un saber apreciar las cosas pequeñas. Me llena de paz tu acuarela. Abrazo.
Dolce, no lo sé, pero far niente, segurísimo.., me dió tiempo a pintarla diez veces...me senté y disfruté de lo que pasaba. Pax domini sit semper vobiscum. Un abrazo, sin prisas y sin agobio, Carmen.
Dolce vita si el día tiene el mismo resplandor que el cielo de tu acuarela. Yo, como tu personaje, también me sentaría a observar el horizonte con calma... Un fuerte abrazo, Fernando.
Dolce vita, sin baño en la Fontana di Trevi. Se sento, y sesenta y ocho, y se quedó alli, dulceando por la vida, y la vida es sueño... y casi se durmió. Hay que aprovechar, modelo quieto, dibujo que te arreo. El horizonte ni lo veía, sus ronquidos amenazaban lluvia. Multipluriconceptual artístico, un abrazo.
Jopelines, qué fastidio, llego cuando ya se ha destapado el pastel. No el de los colores, que en ellos, en la tibia luz, en el resplandor de la escena, en lo poético del conjunto reparé , creo que con tino, sino por la misteriosa protagonista, sobre la cual yo ya me había hecho mi película: era -sin duda- un tierno infante sentado a la orilla de una gran fuente-estanque esperando, como en los parques franceses, para botar su velero de madera. Aunque, por otra parte, pensándolo bien, mal por mi parte, Marga, muy mal observado y deducido, porque ¿Qué tierno infante -con salud- para mucho rato quieto para nada en concreto? Eso me pasa por estar a lo que tengo -me obligan- a estar... en plena eclosión de manualidades boderiles varias... Ay Señorrr... Estoy perdiendo -¿ además de las cabezas?- facultades...
Abrazotes gordotes (ruego me dispense de esta mi tardanza, pero estamos ya en plena cuenta atrás y se nos acumula la tarea que da gusto -y trabajo- )
El pastel, siempre te esperará, y no habrá destape, ni descorche, ni tan solo en la tibia luz, del conjunto de la escena. En mi película, sentado a la orilla, esperándo los franceses, para botar su velero, un tierno infante, con salud de madera, ay Señor, muy mal observado, perdiendo las facultades por estar obligado a que le pase la eclosión de las boderiles manualidades. Vive la france et la patrie. !!!
Bella imagen, de color, diseño y composición, esa visión contemplativa de un paisaje que bien lograda. Una belleza.
ResponEliminaLa buena mujer pasaba toda la mañana, sin cambiar de
Eliminalugar, al final me decicí pintarla, y ya ves, sigue y
sigue, inmóvil...
Gracias Carmen .
... dolce far niente, en estos días cálidos, llenos de luz, sentarse a disfrutar de lo que pasa alrededor, sin prisas, sin agobios, es una bendición y un saber apreciar las cosas pequeñas. Me llena de paz tu acuarela.
ResponEliminaAbrazo.
Dolce, no lo sé, pero far niente, segurísimo..,
Eliminame dió tiempo a pintarla diez veces...me senté y
disfruté de lo que pasaba.
Pax domini sit semper vobiscum.
Un abrazo, sin prisas y sin agobio, Carmen.
Dolce vita si el día tiene el mismo resplandor que el cielo de tu acuarela. Yo, como tu personaje, también me sentaría a observar el horizonte con calma...
ResponEliminaUn fuerte abrazo, Fernando.
Dolce vita, sin baño en la Fontana di Trevi.
EliminaSe sento, y sesenta y ocho, y se quedó alli,
dulceando por la vida, y la vida es sueño... y
casi se durmió.
Hay que aprovechar, modelo quieto, dibujo que te arreo.
El horizonte ni lo veía, sus ronquidos amenazaban lluvia.
Multipluriconceptual artístico, un abrazo.
Jopelines, qué fastidio, llego cuando ya se ha destapado el pastel. No el de los colores, que en ellos, en la tibia luz, en el resplandor de la escena, en lo poético del conjunto reparé , creo que con tino, sino por la misteriosa protagonista, sobre la cual yo ya me había hecho mi película: era -sin duda- un tierno infante sentado a la orilla de una gran fuente-estanque esperando, como en los parques franceses, para botar su velero de madera. Aunque, por otra parte, pensándolo bien, mal por mi parte, Marga, muy mal observado y deducido, porque ¿Qué tierno infante -con salud- para mucho rato quieto para nada en concreto? Eso me pasa por estar a lo que tengo -me obligan- a estar... en plena eclosión de manualidades boderiles varias... Ay Señorrr... Estoy perdiendo -¿ además de las cabezas?- facultades...
ResponEliminaAbrazotes gordotes (ruego me dispense de esta mi tardanza, pero estamos ya en plena cuenta atrás y se nos acumula la tarea que da gusto -y trabajo- )
El pastel, siempre te esperará, y no habrá destape, ni descorche, ni tan solo en la tibia luz, del conjunto de
Eliminala escena.
En mi película, sentado a la orilla, esperándo los
franceses, para botar su velero, un tierno infante, con
salud de madera, ay Señor, muy mal observado, perdiendo
las facultades por estar obligado a que le pase la
eclosión de las boderiles manualidades.
Vive la france et la patrie. !!!