27/10/16

Codonys Amargs


9 comentaris:

  1. Y volvió el color, has conseguido unos grandes contrastes entre los carmines y los blancos, tanto en el fondo, como en los primeros planos, no conozco ese fruto, a mí en principio me parecían brevas. Enhorabuena.

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    1. Este siempre debe de estar presente,
      el color.
      Estos frutos son... Membrillos, que crudos
      son muy amargos, tan buena confitura... cuando
      hervidos y bien azucarados.
      Los contrastes salen, por su propio pié.
      Seguiremos investigando. Gracias por tu
      comentário, Carmen.

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    2. Tienes razón, membrillos, hace unos días, he estado haciendo dulce de los mismos (de otros), ¡qué buenos.

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  2. Muy trabajado ese fondo, texturas muy interesantes a base de acuarelas, ceras?, acrílicos? y esos membrillos ocupando el centro de la composición y de la atención del que mira, el color cárdeno potencia el amarillo oro de la fruta. Me gusta mucho.
    Aperta.

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    1. Ay !! si supieras lo de los fondos....
      Menos al escondite, se ha jugado a todo,
      y con todo lo posible.
      La cuestión del color, ha salido así,
      espontáneo, y a bote pronto, que te puedo
      contar que tu no sepas.
      Contento estoy, de que te guste.
      A PINTAR !!!!

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  3. Me gusta el contraste que se produce entre ese aire como en penumbra, una tanto decadente de los propios membrillos frente a la luminosidad que la paleta de colores complementarios da a todo su entorno. La frialdad de los resaltes en blanco consiguen otorgar a la imagen de conjunto una luminosidad, fría, casi mística, y los dos membrillos se me aparecen, cual pareja de solitarios monjes, al abrigo de la luminosidad umbría del claustro del convento.

    Abrazotes gordotes de jueves

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    1. Ahora que lo dices, un poco conventual
      si parece, y de una cuaresma tardía.
      El comer membrillos crudos, tiene su dósis
      de sacrifício, claustral.
      Solitários, y tirados por los suelos, de
      este supuestamente imaginado claustro,
      dá un poco de frío verlos, a pesar de los cálidos
      tonos, que cinicamente los envuelven.
      Margarita..., cosas de la vida...

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  4. Acabo de ver en otro blog tus pescados, ahora aquí estos membrillos... ¡amigo vas a ilustrar un libro de cocina!
    Un abrazo, Fernando.

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    1. Es el indicador, del ánsia de comida, a
      causa de la hambruna reinante. En casa,
      mirándolos, ya tienen bastante, pasar la
      servilleta por los lábios.... y a dar una
      vuelta para distraerse.
      En cuanto a ilustrar...., no iría mal
      el retorno de la ILUSTRACIÓN.
      Amigo, por abrazado me doy.

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