Que bella ambientación, colores suaves, ese otoño que se adivina, un conjunto de personas, que con sus colores tan armónicos llenan de vida el espacio y no te digo el primer plano del señor que recoge las hojas, con que elegancia.
Otro de tus paisajes urbanos llenos de vida y actividad y con que aparente sencillez colocas a cada figura en su sitio... Si veo una obra tuya en cualquier sitio, la reconocería de inmediato, tu estilo es inconfundible. Vamos, hay que seguir investigando. Abrazo, Fernando.
Me gusta que en los temas, sobretodo urbanos, figuren personajes, i, si posible, que se muevan. Me alegra que puedas reconocer mis obras, a primera vista, las tuyas también las reconozco. Si, Carmen, seguimos trabajando. Un saludo.
Amigo Oñera, Que oído tan fino tienes... En el dibujo urbano, para mi, cuenta más la gente, que los edificios, y sobre todo la luz. Conseguirlo, ya es otra cosa. Un abrazo conventual.
Que bella ambientación, colores suaves, ese otoño que se adivina, un conjunto de personas, que con sus colores tan armónicos llenan de vida el espacio y no te digo el primer plano del señor que recoge las hojas, con que elegancia.
ResponEliminaDe tiempo en tiempo, una un poco mas
Eliminaclásica, para un alto en el camino.
El señor que barre, es el auténtico
protagonista.
Muchas gracias Carmen.
Otro de tus paisajes urbanos llenos de vida y actividad y con que aparente sencillez colocas a cada figura en su sitio... Si veo una obra tuya en cualquier sitio, la reconocería de inmediato, tu estilo es inconfundible. Vamos, hay que seguir investigando.
ResponEliminaAbrazo, Fernando.
Me gusta que en los temas, sobretodo urbanos,
Eliminafiguren personajes, i, si posible, que se muevan.
Me alegra que puedas reconocer mis obras, a
primera vista, las tuyas también las reconozco.
Si, Carmen, seguimos trabajando.
Un saludo.
¡Qué bien captas estos rincones urbanos! La gente, la atmósfera, el ambiente... ¡Si hasta estoy oyendo la algarabía!
ResponEliminaUn abrazo, Fernando.
Amigo Oñera, Que oído tan fino tienes...
EliminaEn el dibujo urbano, para mi, cuenta más
la gente, que los edificios, y sobre todo
la luz.
Conseguirlo, ya es otra cosa.
Un abrazo conventual.